Pareja convierte desechos de cultivos de plátano en toallas higiénicas biodegradables –
La pareja de mayores contemporáneos Hetal y Chirag son los autores de toallas femeninas reciclables Sparkle. Empleando almidón de maizfibra de bambú y de plátano, entre otros muchos materiales. Su iniciativa fue producto del incremento de la inasistencia a clases, por la parte de las pequeñas en edad pre joven. A pesar de que los materiales utilizados en su confección no son recurrentes, exactamente las mismas se convirtieron en una increíble opción alternativa.
En la India, en el momento en que las pequeñas tienen su primera regla dejan de ayudar a la escuela, esto representa un 23%, según la UNICEF. No obstante, ese inconveniente se solventa en el instante en que las toallas femeninas están a su alcance, favoreciendo el incremento de la tasa de asistencia a las salas de clase.

surat fue la localidad que vio nacer y medrar a Hetal, que a lo largo de un buen tiempo fue perjudicado por los tabúes que cubren este periodo de tiempo natural de la mujer. En una investigación que efectuó, ha podido constatar el encontronazo negativo para la salud de la piel íntima que causaron los materiales con que las toallas comúnes son fabricadas. En su búsqueda de novedosas opciones, en el mercado se encontró con algunas fabricantes de toallas ecologicas femeninas. Exactamente las mismas no contenían agentes alergénicos, con lo que eran mucho más cómodas para emplear, pero eran tan costosas como el resto.
“Tras comprender a Chirag, que se encontraba estudiando maneras de remover los desechos agricolas generados en su plantación de plátano, elegir publicar juntos Sparkle en 2018, consiguiendo la fibra de plátano de los labradores locales, ahorrándoles el valor de supresión”.

El desarrollo de estas plantas se da en un transcurso de un año, lo que equivale a 64 millones de toneladas de desechos. Chirag asegura qué: “Tras cada cosecha, los labradores queman estos tallos desechados que ocasionan polución al aire o deben abonar mano de obra agregada para sacarlos de sus huertas”.

Las toallas utilizadas en su cubierta superior están fabricadas de polipropileno, la parte que absorbe el líquido, el poliacrilato de las dos sodio surgen del petróleo y su parte de abajo de polietileno, todos, materiales enormemente contaminantes.

Tras un semestre estas toallas se biodegradan, con una función diferente y práctica que se encuentra en todos sus elementos, como la antibacteriana de la fibra de bambú y una alternativa al plástico con apariencia de opción alternativa compostable.

Las toallas desarrolladas en la India marcan gran diferencia respecto a otras, que asimismo son ecológicas. Y sucede que estas últimas, son importadas de China, les cambian el empaque y son ofertadas como un producto de alto rango. En cambio, las toallas Sparkle son un producto y material 100% autóctono.