Fue a buscar un cachorro para adoptar y se halló con el perro que había perdido hace 2 años –
Aisha Nieves se había rendido en su búsqueda de Kovu. Este perro se había perdido de manera inexplicable y su dueña lo procuró sin frenos a lo largo de un buen tiempo.
Afiches, buscas, visitas a cobijos en su localidad Allentown, Pennsylvania, USA, no fueron precisos para localizar al amigo canino. Los sentimientos eran varios y la sensación de que Kovu había tenido un mal destino eran recurrentes.
En el momento en que al fin se dedicó a proseguir con su historia y aceptó que había que ofrecer el próximo paso, decidió adoptar otra mascota. Para eso fue mirando el lugar de internet Lehigh County Humane Society donde había encontrado a Kovu la primera oportunidad.
En su búsqueda ver unos ojos café que le parecían familiares, pero que no le aportaban seguridad. Frente a la indecisión brotó ir al centro donde se hallaron los caninos.

Aisha dice: “Al notar la publicación por Internet pensé: Espera, no puede ser él. Entonces, vi la pequeña marca sobre un ojo, la marca de en el momento en que se quedó atascado en una verja, y pensé: ¡Santo dios, es mi bebé, es Kovu!”. Se abrazaron con alegría y afloraron lágrimas de sus ojos al después hallarse de una extendida espera.

Similar historia representa una situación que no debe perder la raza humana y es la carencia de promesa. Hubiera sido lo mucho más simple descuidarse de este amigo canino, pero vivencias como estas dejan la sensacion de que nada hay que dejar como capitulo cerrado.
